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¿Donde estará,
la prenda que prefiero,
La que adoro y que quiero,
con loco frenesí?
¿Quién le dirá,
que sin ella me muero,
que por ella me desvelo,
desde que su amor perdí?
Para mi ennegrecido,
este mundo de historia,
que ha sembrado en mi alma,
la angustia y el dolor.
Nada me satisface, ni me lleva a la gloria.
Su ausencia me provoca,
amargo sinsabor.
Oh destino tan cruel,
no me amargues la vida.
No me dejes sufrir,
este martirio austero.
Haz que vuelva hasta mi.
Esa prenda querida.
Cuéntale mis congojas.
Y dile cuanto la quiero.
¿Donde estará,
la prenda que prefiero,
La que adoro y que quiero,
con loco frenesí?
¿Quién le dirá,
que sin ella me muero,
que por ella me desvelo,
desde que su amor perdí?
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